La ciencia actual conocía que durante el fenómeno llamado Resonancia de Schumann, los relámpagos crean ondas de baja frecuencia que rodean a la Tierra. Durante este fenómeno gran parte de la energía de esas olas queda atrapada en la atmósfera terrestre entre el suelo y la capa de la ionosfera. Ahora los científicos comprobaron que hay fugas de esta energía hacia afuera, es decir hacia la ionosfera, señala un informe de la NASA del 28 de noviembre.
En un momento dado si se observa la Tierra en forma global, se pueden producir unas 2000 tormentas eléctricas con alrededor de 50 relámpagos por segundo, señalan los científicos del clima.
Cada ráfaga de rayos genera ondas electromagnéticas que inician a dar la vuelta alrededor de la Tierra y pueden ser captadas entre la superficie terrestre y un límite de unos 60 kilómetros de altura.
Algunas de estas ondas – si completan su longitud de la onda – se combinan, lo que genera un aumento de la fuerza, y esto a su vez da origen a una suerte de “latido del corazón” que se repite a nivel atmosférico y se conoce como Resonancia Schumann, explica el informe.( Ver video NASA)
Para los científicos esta resonancia es una herramienta útil para analizar el clima de la Tierra, su entorno eléctrico, y para ayudar incluso a determinar qué tipos de átomos y moléculas existen en la atmósfera terrestre, pero hasta ahora sólo ha sido observado desde abajo.
El instrumento vectorial de campo eléctrico VEFI de la Goddard Electric de la NASA a bordo de un sistema de comunicaciones de la Fuerza Aérea de Estados Unidos detectó por primera vez desde el espacio un tipo especial de ondas de baja frecuencia que vistas desde desde el espacio se escapaban desde la ionósfera hacia el espacio inferior de la atmósfera terrestre y que corresponderían a la Rensonancia de Schumann.
Según el científico Fernando Simoes, quien publicará en diciembre sus investigaciones del comportamiento de este fenómeno, el concepto de la resonancia es relativamente simple, y funciona pues la adición de energía en cualquier momento ayuda a que esta crezca.
El cita como ejemplo al columpio en que si uno empuja de nuevo se agrega velocidad y en un empuje hacia atrás por el contrario se disminuye su velocidad.
“Cuando se trata de ondas, la resonancia no se produce a causa de un empujón como en los balancines, sino que debido a una serie de olas superpuestas que están sincronizadas de tal manera que las crestas se alinean con las crestas de las otras”.
“Naturalmente, esto conduce a una ola mucho más grande en donde las crestas y valles se cancelan mutuamente. Las olas creadas por un rayo no se ven como el arriba y abajo de las olas del océano, pero todavía oscilan con las regiones de mayor energía y menor energía”.
Las ondas provocadas por las tormentas eléctricas e innumerables relámpagos en la tierra, permanecen atrapadas dentro de este límite definido de la atmósfera creado por el borde inferior de la “ionosfera”, la cual es una parte de la atmósfera que comienza a unos 60 kilómetros hacia el cielo.
Para la resonancia se requiere que la onda sea tan larga como la circunferencia de la Tierra, además es una onda de frecuencia extremadamente baja, como de 8 Hertz (Hz), es decir unas cien mil veces menor que las ondas de baja frecuencia de radio que envían señales a una radio AM / FM.
Las ondas de Resonancia de Schumann fueron predichas en 1952 por Winfried Otto Schumann, y se midieron por primera vez de forma confiable en la década de 1960, señala la NASA.
Desde entonces, los científicos han descubierto que las variaciones en las resonancias se corresponden con los cambios en las estaciones del año, la actividad solar, la actividad en el entorno magnético de la Tierra, en los aerosoles de agua en la atmósfera, y otros fenómenos vinculados de la Tierra aclara el científico Rob Pfaff del equipo Goddard.
http://www.lagranepoca.com/21963-equipo-de-la-nasa-observa-ondas-de-resonancia-de-schumann-por-primera-vez-desde-el-espacio