por vclobo
[b]Tunguska: el Roswell ruso
Poco después de las 7.00 a.m. del 30 de junio de 1908, en la helada llanura de Siberia cerca del río Tunguska, granjeros y pastores vieron cruzar el horizonte de la mañana a una especie de objeto cilíndrico brillando con una luz blanca y dejando una ardiente estela. El objeto estaba entre 6 y 10 kilómetros de altura, sobre una desolada región de tundra y pinares, cuando a las 7.17 a.m. explotó en una especie de tremenda bola de fuego que al caer devastó 2000 Kilómetros cuadrados de tierra, algo equivalente a un área mayor que Los Angeles. Azotaron tormentas durante varias semanas y hubo incendios en más de 10.000 kilómetros rodeando el punto de impacto. Esta explosión se sintió a miles de kilómetros de distancia.
Por extraño que parezca las investigaciones comenzaron en esa locación 19 años después y no se encontró cráter de ninguna especie ni evidencia decisiva que pudiera ayudar a los científicos a determinar que creó aquella masiva explosión, hasta ahora. Luego de más de noventa años de investigación en el lugar del choque por miles de científicos rusos y de otros países, aún no hay un consenso entre científicos para identificar el objeto que lo originó.
Un grupo de científicos encontró el punto de impacto y ellos descubrieron algo muy interesante, un bosque que por muchas millas cuadradas había sido derribado y todos los árboles apuntaban radicalmente hacia el punto de impacto, y en ese punto había un gran hoyo en la tierra. Ahora, lo interesante es que no han encontrado nada que pudiera haber causado el impacto, hay un bosque derribado, un gran hoyo y nada más.
La evidencia encontrada arroja varias propuestas, desde el impacto de un asteroide o cometa, al contactar con antimateria o un mini agujero negro hasta una descarga de un arma futurista. Algunas evidencias, aparentemente recolectada varios años atrás por científicos rusos, fueron confiscadas sin ninguna explicación ocultado por el Ministerio de Seguridad Estatal luego conocido como KGB. Un coronel de la KGB de la ex Unión Soviética admite haber sido parte del complot del gobierno para ocultar evidencia crucial, él explicó que su papel dentro del esquema del gobierno era recolectar las conclusiones descubiertas por varios científicos rusos e informar de la evidencia recolectada en Tunguska. Tunguska guarda las marcas del auténtico choque de una nave interplanetaria de origen extraterrestre sucedido hace más de noventa años.
Ahora presentamos por primera vez un relato de la misteriosa explosión por Svetlana Polonov, uno de los últimos testigos con vida. "Yo tenía siete u ocho años en ese momento y lo vi con mi padre, en una pequeña villa cerca de las vías del tren y nunca olvidaré que parecía como una larga chimenea con una cola de fuego. Recuerdo que le dije a todos lo que había visto: y de repente bajó pero luego se inclinó un poco y luego estuve segura de que había cambiado de posición. Desapareció detrás de un cordón montañoso, lo recuerdo como si hubiera sido ayer, me pareció que el mundo se iba a terminar, hubo una luz que llenó todo el cielo, me cubrí los ojos con las manos y pude ver los huesos de mis manos". Alrededor de 900 testigos que vivían cerca del lugar del choque dieron testimonios similares, sus historias hablan de un objeto que cambia su trayectoria, maniobra que contradice cualquier explicación científica lógica o acontecimiento natural. Es físicamente imposible que un meteoro o cometa cayera en la gravedad de la Tierra y luego pudiera cambiar de dirección mientras caía en nuestra atmósfera. Cualquiera halla sido el fenómeno, no se comportó como ningún objeto conocido en la naturaleza.
Dado lo remoto del área las secuelas de la Primera Guerra Mundial y los conflictos civiles dentro de Rusia de los que resultaría la revolución comunista, recién en 1927 fue montada una expedición para investigar lo sucedido en Tunguska. Luego de arribar al lugar, los miembros de la expedición se sorprendieron por la extensa devastación aún evidente después de 19 años de la explosión. Árboles del tamaño de postes telefónicos, parecían arrancados como con una pinza en un patrón radical, todos apuntando hacia un mismo centro como los rayos de la rueda de una bicicleta. Aparte de eso no se descubrió ningún cráter y no había rastros de poder encontrar algún enorme meteorito en las inmediaciones. Había, sin embargo, muchos fragmentos metálicos pequeños incrustados en los árboles caídos, estos fueron recolectados para su análisis.
Mucha gente que vivía cerca del lugar de la explosión murió de una enfermedad desconocida, mostrando síntomas nunca antes vistos en la región.
A 900 kilómetros de la explosión un observatorio gravó disturbios en el campo magnético de la Tierra, varias tormentas magnéticas ocurrieron al mismo tiempo o poco después del evento de Tunguska. Estas anomalías no pudieron ser explicadas con significados naturales. Muchos expertos creen que las personas que murieron de esa extraña enfermedad en Tunguska perdieron sus vidas como resultado de envenenamiento por radiación, basándose en que las personas que vivían cerca del blanco en las dos bombas atómicas lanzadas sobre Japón experimentaron idénticos síntomas de la enfermedad que sufrieron vecinos de Tunguska.
Aunque la hipótesis oficial es la caída de un meteorito o cometa, ésta no explica la radiación y los cambios climáticos. Otra teoría más convincente con los relatos de los testigos sugiere que la explosión de Tunguska fue causada por el motor de una nave interplanetaria. La hipótesis dice que si una nave entra a la atmósfera con un grado equivocado de inclinación se desintegrara como resultado del calor provocado por la fricción. Si el ángulo de entrada es agudo la nave descenderá pero luego será expulsada de la atmósfera. Entonces, la nave debe de haber entrado con un ángulo agudo y comenzó a navegar fuera de la atmósfera terrestre; al intentar cambiar de curso el calentamiento causado por la fricción causó el choque y la explosión.
Muchos achacan lo ocurrido a Nikola Tesla, ese científico tan desconocido para muchos y que por la mala fama que se forjó no figura en muchas enciclopedias. Pero pasemos a esta teoría de que Tesla fue realmente el que ocasionó la explosión de Tunguska, por que no tiene desperdicio.
Todo comienza cuando Tesla proclama a todo el mundo que tenía un arma que denominó EL RAYO DE LA MUERTE, capaz de enviar un rayo electromagnético a centenares de kilómetros y arrasar grandes extensiones de Tierra, vacilando que podría con esta arma partir la tierra como si fuera una manzana.
Envió una carta a Woodrow Wilson, Presidente Americano, en la cual le explicaba el funcionamiento de su máquina y aseguraba tener las pruebas de su buen funcionamiento, que era ideal para destruir grandes extensiones de tierra y que solamente pondría una condición, que el uso de su invento se hiciera con fines defensivos.
Relataba en esta carta, que en 1.908, mientras su amigo Robert Peary intentaba llegar al Polo Norte, enviaría uno de sus rayos de la muerte, para que cayera al oeste de donde este se encontraba y que unos días antes le envió el siguiente telegrama según se reseña en la Fundación Tesla: “Amigo Peary, voy a mandar un rayo cerca de donde estás y ya me dirás como ha ido todo”.
Su intención era que su amigo y la expedición que dirigía, observasen al anochecer una intensa luminosidad. No ocurrió nada, ni Peary ni su expedición vieron nada.
Lo curioso es que el mismo día que llegó teóricamente Peary al Polo Norte, a unos 16.000 Km de distancia ocurriera la explosión de TUNGUSKA.
Como el Presidente Wilson no le hizo ni caso, según noticias recientes, indican que envió esta misma carta a otros líderes mundiales, y que estos cuando recibieron los planos del RAYO DE LA MUERTE, dejaron de tomar en serio el Invento de Tesla.
Para seguir con esta teoría hay que recordar que en esa década hubo varias explosiones de menor gravedad e intensidad, en diversos puntos de la Tierra, que algunos osados se las achacaban al Rayo de la Muerte de Tesla, ya que este comentaba en su entorno científico que podría destruir una ciudad con solo accionar uno de sus inventos.
Hay un experimento que realizó en su laboratorio que realmente avala el poder de sus inventos. Dicen que estaba experimentando con un Oscilador y que se le ocurrió ponerlo en la viga central de su laboratorio, todo comenzó a vibrar, pero pronto se dio cuenta que también vibraban la mayoría de los edificios de los alrededores, además que lo hacían de modo sincronizado con su laboratorio, pero en el momento que comenzaron a romperse cristales y desplazarse los muebles por el mini-terremoto que estaba causando tuvo que destruir con un martillo el Oscilador.
Meses después de este experimento comentaba que podría destruir la Tierra si quisiera.
Con este tipo de discurso apocalíptico que hoy describiríamos como discurso Terrorista, los Gobiernos y los que le financiaban cogieron miedo POR SI TENÍA RAZÓN en lo que decía.
Otro aval de que sus experimentos eran muy reales, es que consiguió crear una energía de 4 millones de voltios con la intención de iluminar todas las lámparas en 40 km a la redonda, la pena es que aunque lo consiguió, su laboratorio explotó.
En contra de esta teoría, de si fue Tesla el causante de Tunguska, es que se le consideraba un chalado a pesar de sus más de 700 patentes.
Pero hay algo extraño en todo esto que os he relatado, en 1.943 fallece Tesla y los agentes gubernamentales, se llevan absolutamente todo lo que tenía, siendo declarado secreto Federal del Gobierno Americano, extremo que a día de hoy se sigue manteniendo ese secreto.
En este enigma aún nadie sabe lo que realmente pasó, pero ante otras teorías, como que fuera un Ovni el causante de la explosión de Tunguska, sinceramente prefiero pensar que fue una mente privilegiada y olvidada la causante de este misterio.[/b]