El 2012 inició con una gran actividad para los investigadores OVNI de Argentina quienes buscan la institucionalidad de este tema en aquel país y que dieron a conocer el 02 de enero durante la inauguración de la nueva sede del museo OVNI de Victoria, provincia de Entre Ríos, siete hojas del reporte de un avistamiento que aconteció el 02 de noviembre de 1972 a las 20:30 horas sobre Campo de Mayo, en Buenos Aires y que por primera vez, y después de 40 años es conocido gracias a un elemento de Gendarmería Nacional, que lo proporcionó al grupo Visión OVNI.
Este documento “es una de las piezas más valiosas que hemos conseguido en los años que venimos trabajando bajo el concepto de desclasificación, aún más que la Fuerza Aérea, Gendarmería es uno de los organismos que más intervención ha tenido en cuanto a los casos OVNI”, nos aseguró, la directora de la Comisión de Estudios Fenómeno OVNI de la República Argentina, Cefora, Andrea Pérez Simondinni. Por su parte, la titular del grupo Visión OVNI, Silvia Pérez Simondinni nos dijo que “sabemos que Gendarmería es una de las instancias que más archivos tiene sobre OVNIs”. Pero lo que más llamó la atención de nuestras entrevistadas es que no se tenía conocimiento de la existencia de este expediente.
UN OVNI CONTRA EL AVIÓN
Avistamiento que duró 40 minutos y que fue reportado por el Segundo Comandante, Ramón Héctor Flores del Escuadrón de Vuelo de Gendarmería con asiento en Campo de Mayo, Buenos Aires. Un objeto volador con forma de esfera que presentaba un color entre rojo y azul, que se encontraba sobre la vertical del aeropuerto local y que en la página 2 se menciona que “El objeto se mantuvo estático, acompañando luego el desplazamiento del avión de Gendarmería Nacional matricula GB78 durante el lapso de 10 a 12 minutos”, se trataba de una aeronave Cessna 182, monomotor y que sus ocupantes a través de las ventanillas observaron todos sus detalles que quedaron plasmados en el Anexo 11, donde el también instructor de vuelo, se dirigió hacia ese fenómeno para observar a 12 kilómetros de distancia que era “un objeto con forma de media luna con su borde interior irregular, pendiendo aparentemente fuera del mismo y en su parte inferior una luz de reducido tamaño con bordes azulados, la que posteriormente desapareció”.
Este reporte dice que la aeronave de Gendarmería estuvo a una distancia de 300 metros del OVNI y tuvieron que realizar una maniobra de viraje hacia la izquierda con el propósito de evitar una colisión, a una altura de 1600 metros sobre la localidad de Campana, Buenos Aires. Minutos después y con la única intención de observar mejor a esa esfera apagaron las luces del panel de control y de posición de la aeronave. Al momento de hacer el viraje los testigos lograron observar “dos o tres luces blancas y pequeñas”, pero lo que nunca se imaginarion los tripulantes del Cessna fue que este objeto por algunos minutos los seguiría muy de cerca, por lo que realizaron varias maniobras sin el objetivo de que perder o alejarse de dicha esfera. Torre de Control de Campo de Mayo ordenó a la aeronave el “inmediato regreso a la base”, al aterrizar fueron recibidos por personal militar para que informaran de lo sucedido. En el último párrafo de la hoja 6 se afirma que “la tripulación pudo escuchar por radio, que un avión de Aerolíneas Argentinas informaba tener a la vista dicho fenómeno”, finalmente este OVNI desapareció y nadie supo el momento exacto.
Ante este extraordinario testimonio de lo sucedido en 1972 el Comandante Alberto Thomasse, Jefe de Escuadrón de Vuelo de Gendarmería, validó con su firma el testimonio del Comandante Flores, por considerarlo un elemento con una gran calidad profesional y moral.
Un documento que sin lugar a dudas es muy importante por la trascendencia del hecho y porque desde hace cuatro décadas no se tenía conocimiento de un documento parecido.
Fuente: EL UNIVERSAL Gráfico
Documentos Cortesía: Andrea Pérez Simondinnni
Documentos Cortesía: Andrea Pérez Simondinnni
