Las estrellas para brillar transforman el hidrógeno en helio. Cuando hacia la mitad de su vida (varios millones de años) una estrella se queda sin hidrógeno, el núcleo se convierte enteramente en helio y la estrella declina: se vuelve más fría y brillante y muere.
Después pueden suceder varias cosas, dependiendo de su masa. Si la estrella es muy grande puede utilizar otro combustible distinto del hidrógeno. Si no, comenzará a enfriarse.
Cuanto más grande es una estrella más corta es su vida. Las estrellas que son entre 20 y 50 veces más grandes que nuestro Sol viven solamente varios miles de años. Mueren pronto porque consumen mucha energía.
Estas estrellas más grandes logran utilizar el helio de su núcleo como combustible, generando carbono y oxígeno como deshecho. Mientras dura este proceso se las llama gigantes rojas o supergigantes, dependiendo de su masa inicial. Si la estrella es enorme, será capaz de elevar la temperatura de su núcleo hasta los mil millones de grados y quemará el carbono transformándolo en silicio y azufre. Son las llamadas supergigantes azules.
La estrella terminará explotando después de haber caído sobre sí misma. Todas las capas exteriores de la estrella se contraerán hacia dentro con velocidades de hasta 70.000 kilómetros por segundo. En este momento es cuando se crean mucho elementos químicos presentes en la naturaleza, como el cobre, el platino o el oro. Después, la estrella muere y recibe el nombre de supernova.
La supernova brilla durante algunos meses, incluso años, con más intensidad que diez mil millones de soles. Los telescopios pueden descubrirlas en galaxias lejanas, a distancias de miles de millones de años luz. Después la estrella se transforma en un agujero negro o en una estrella de neutrones.
Las estrellas como nuestro Sol pueden vivir alrededor de 10 mil millones de años, incluso más si son más pequeñas. Si la estrella tiene menos de nueve veces la masa de nuestro sol, una vez que ha terminado su vida activa y ha transformado todo su hidrógeno en helio, se convierte en una enana blanca. Ése también es el destino de nuestra estrella solar.
En este vídeo puedes ver cómo nacen y mueren las estrellas:
En la constelación de Orión pueden verse una supergigante roja (Betelgeuse) y una supergigante azul (Rigel). Nuestro Sol vivirá alrededor de siete mil veces más que ellas, al ser aproximadamente 20 veces mayor cada una.
http://www.ojocientifico.com/3613/como-muere-una-estrella