En la época Atlante, hace más de 24.000 años se utilizaba la Constelación de Orión y Sirio para guía de sus viajes astrales, su ampliación de conciencia y el cambio o paso de dimensiones, esta información, se recuerda, se recupera en la época del Día Galáctico.
Así también lo utilizaron los egipcios. Pero hace unos 10.800 años, cuando entramos en la Noche Galáctica perdimos “la memoria” de cómo conectarnos con esta guía.
Al desaparecer, al desvanecerse el conocimiento de nuestras guías, nuestro GPS, perdimos el saber del uso de dicho sistema. El la Constelación de Orión se utilizaban las estrellas guías del cinturón de Orión, en combinación con Sirio, Alción (que es el Sol del Cúmulo de las Pléyades) Arcturus y Andrómeda. El comienzo de un nuevo día galáctico, lo marca la alineación de estas estrellas
El día Galáctico, también es un cinturón de fotones, es una nube electromagnética, o nebulosa dorada, o nebulosa radiante. Entendamos que una partícula de luz fotónica es el resultado de la colisión entre un anti-electrón (positrón) y un electrón. Esta colisión se produce en una fracción de segundo y resulta en la mutua destrucción de ambas partículas. La masa resultante de esa colisión es convertida totalmente en energía, que se registra como fotones o partículas lumínicas.
En 1932 el Dr. Carl David Anderson, ganador del Premio Nóbel 1936, descubrió la primera de estas anti-partículas: el positrón o electrón positivo.
El universo entero se mantiene unido por medio de vórtices dentro de vórtices de energía centrípeta--con sus campos electromagnéticos asociados--como una vorágine de agua, dentro de vorágines más grandes, Para graficarlo serian tubos toros, dentro de otros tubos toros.
 |
|---|
Estas energías, moviéndose en espiral, dan lugar a órbitas naturales del espacio/tiempo: satélites alrededor de los planetas, planetas alrededor de las estrellas, sistemas solares alrededor de otros centros de vórtices mayores, y así sucesivamente. Nuestro planeta Tierra orbita al Sol una vez al año, pero nuestro sistema solar también atraviesa una órbita en esta sección de la galaxia, con un período de aproximadamente 24,000 años. Hay muchos otros sistemas solares (estrellas) en este movimiento cíclico (así como hay numerosos planetas girando alrededor del Sol).
Las Pléyades que está cercada por el cinturón de fotones está aproximadamente a 400 años de luz de nosotros, y es parte de este sistema, y, de hecho, nuestro sistema solar gira alrededor del sol central de las Pléyades, Alción.
El cinturón consiste de muchas bandas de fotones, emanando del centro de la galaxia, y asociados con los brazos espirales de la galaxia. Esto significa que nuestro sistema solar atraviesa dos veces por el cinturón en cada ciclo de 24,000 años (es decir, en cada medio ciclo). El espesor de la nube de fotones es tal, que técnicamente, toma aproximadamente 2000 años para que nuestro sistema solar lo atraviese, y por consiguiente, aproximadamente 10,000 años entre cada encuentro con este cinturón (2 x 10,000 más 2 x 2000 = 24,000 años).
La activación estelar, el comienzo del día galáctico, ocurre cuando nuestro sistema solar se alinea con las bandas de más altas frecuencias de las Pléyades (la estrella Alción), Sirio, Arcturus, Orión, y Andromeda.
Las bandas de frecuencia, entonces, se combinan y pasan a través de la Tierra. Si la Tierra está fuera de equilibrio dentro de sí misma, las más altas frecuencias causarán un reordenamiento, por tal motivo es tan importante la elevación de la masa critica de conciencia, que estando en un 2% de su estado completo, se evita todo tipo de toma de conciencia traumática, de choque o corto circuito.
De esta situación es entendible, el hincapié de la velocidad en la toma de conciencia, el cambio de frecuencia, la activación del cerebro, y todo lo que nos vienen insistiendo en concretar, realizar y trasmitir.
Para entender la alineación de las bandas de frecuencia, uno podría pensar en círculos dentro de círculos (ciclos dentro de ciclos), a los cuales están atados imanes, girando a diferentes distancias. Claramente, periódicamente ellos podrían alinearse, formando un poderoso y largo imán. Esto actuaría como una poderosa corriente.
Como está implícito, habrá una selección espiritual natural. En las fases iniciales del encuentro con el cinturón de fotones, sólo los seres sensibles descubrirán algo extraño, pero cuando entremos totalmente, aun los más endurecidos individuos recibirán todos los efectos.
Ocurrirá una gran iluminación de la conciencia, y mucha resistencia a nuevas ideas.
Éste es un período de despertar, esencialmente debido al ciclo de ascensión y a la alineación planetaria.
Qué proporción de efectos son directamente debidos al cinturón, es difícil de decir. No obstante, este fenómeno, tanto del cinturón de fotones más la actividad estelar, reducirán el velo que nos impide ver quienes somos.
Quitará algunas de las barreras alrededor de las células y el ADN, haciéndolos más reactivos o sensibles a las nuevas energías, y, de hecho, el ADN intentará responder a las frecuencias cambiantes, aumentando su capacidad, la activación de sus 13 hélices.
Las características psicológicas de entrar en el cinturón son el efecto de desarraigar material oculto, secreto, o detenido, trayéndolo a la superficie, para transmutación.
Esto significa que patrones de enfermedades psicológicas y físicas serán forzados hacia la superficie, es decir, hacia la mente consciente. Esto dará tremenda oportunidad de hacer avances, aunque también, donde hay demasiado que manejar causará malestar, depresiones, enfermedad y muerte. Esta situación nos da oportunidades para el cambio, agregando nuevas energías. Aumenta el flujo de energía en las rejas magnéticas de la Tierra, atrayendo nuevas ideas y energías. Las personas sentirán la necesidad de transformarse, pero aquéllos que consideran esta realidad física su única expresión, disminuirán hacia mayores fijaciones, bloqueos y negatividad. Aun la persona más densa sería acelerada a un estado más alto de conciencia, causando posibles estragos en su mente y cuerpo, si no están preparados. El cinturón de fotones permite al planeta repararse.
Por ejemplo, ella protegerá su petróleo. Demasiado está siendo sustraído por el hombre, y no todo puede ser reemplazado - no muy diferente al hecho de extraer fluido espinal cerebral del hombre.
La Madre Tierra endurecerá la corteza bajo la superficie y empujará el aceite, también los gases, el carbón y minerales, más profundo hacia el centro, cambiando también, sin causar daños, a las razas benévolas hacia regiones protegidas. El cinturón de fotones, al parecer, no se irá hasta que los humanos utilicen solamente los recursos de la superficie, incluyendo el agua.
Los científicos encontrarán que las partículas sub-atómicas se volverán más evidentes y más fáciles de detectar. La electricidad será reducida y se volverá menos disponible en los próximos 50 años - esto representa un vaciamiento de energía del planeta. La tierra está asumiendo una nueva energía, la energía del PUNTO CERO.
Debemos prender a utilizar esta energía.
Pondremos mas atención a cómo el amor afecta la vida y su química. Nuevas enfermedades surgirán y ritmos cardíacos anormales para el grupo descendente y expansión del corazón para el grupo ascendente.Es muy posible que cuando nuestro planeta entre en las bandas, lo cual sería a una velocidad relativamente alta, experimentaríamos un choque eléctrico inmediato, de una duración de aproximadamente un décimo de segundo, pero sin ser peligroso.
Habrá un renacimiento del Planeta Tierra. Una ILUMINACION, esto es entrar en el estado Crístico de Iluminación.
Hemos tenido muchos mensajes y señales de cómo utilizar estas guías. Por ejemplo, de acuerdo con los Lakotas, la constelación de la Mano, que corresponde a la mitad inferior de la constelación de Orión, representa el brazo de un gran jefe Lakota. El cinturón de Orión corresponde a la muñeca del jefe y el pulgar está formado por la espada. Rigel es la punta del dedo índice, y Beta Eridani es la del dedo pequeño.
La historia relacionada con esta constelación nos cuenta como los dioses querían castigar al jefe Lakota por su egoísmo e hicieron que la Personas del Trueno le arrancaran el brazo. Para ayudar a su padre, la hija del jefe ofreció casarse con aquel que recuperara el brazo de su padre. Un hombre hizo un largo y peligroso viaje a través del cielo y la Tierra.
Estrella Caída, un joven guerrero que nació de una madre mortal y un padre celestial, le recuperó el brazo perdido al jefe y se casó con la hermosa hija. El regreso del brazo al jefe simbolizó la armonía entre los dioses y las personas con la ayuda de la nueva generación.
También los Mayas, nos han dejado su información clara y concisa.Pero la más elocuente es la info de los egipcios en las Pirámides. Que no hemos sabido entender y descifrar, hasta ahora.
Los escritos Mayas, llegan hasta el Año 2012, donde ellos hablan del fin de esta era, que seria estar completamente dentro del día galáctico, ya que todo nuestro sistema solar debe penetrar.
Fin de un ciclo del calendario maya de 26.000 años.
El año 3.114 antes de Cristo se inició un ciclo final del tiempo según el calendario maya que finalizará el 21 de diciembre del año 2.012.
Este calendario ha predicho todos los acontecimientos astronómicos que nosotros conocemos con una exactitud de sólo 30 segundos de diferencia.
Para los mayas esta sería la entrada oficial no sólo en un nuevo mundo purificado por el fuego ,sino en un mundo trasformado por la conciencia.
El inicio de una nueva dimensión de percepción de la realidad y la muerte de todo aquello que no pueda vibrar en consonancia con una nueva forma de concebir la existencia.
Otra señal es las Pirámides, que tampoco supimos entender. Es mucho mas que una simple coincidencia astroarqueológica .
Las tres pirámides de Gizeh (pertenecientes a los faraones Keops, Kefrén y Micerinos de la IV Dinastía) están alineadas con gran exactitud, pese a su monumentalidad, con el cinturón de Orión, es decir, forman una imagen de sus estrellas en la tierra.
En la actualidad esto no es exacto: las tres estrellas de Orión forman un ángulo que difiere por unos pocos grados con el que forman las pirámides.
Pero, si se calculan los cambios precesionales (son las eras de acuerdo al zodiaco) del cinturón de Orión a lo largo de los siglos, se comprueba que hubo un momento en que estas tres estrellas estuvieron alineadas exactamente igual en relación a la Vía Láctea que las pirámides en relación al río Nilo: hacia el 10.500 a.
No sólo éstas últimas están dentro de la correlación de Orión, sino que también el resto de pirámides (construidas la mayoría en dinastías posteriores) tienen su imagen en el cielo; éstas son las de Dahshur, de Abusir, de Zauyat-Al-Aryan y de Abu-Roash.
Al mismo tiempo, la energía del Punto cero, comienza a dar su presencia. Esto tiene su explicación en que para el año 2.012 se alcanzará el zenit o punto más elevado en los ciclos naturales de reposo y cambio o biorritmos de la humanidad.
El año 2.012 es el punto más cambiante jamás experimentado por la humanidad conocida como tal y lo establece como un nuevo punto cero.
Ahora bien, el estar plenamente dentro de estas vibraciones, no es lo mismo que entrar en ellas, es decir; cuando ya estemos dentro, NO HAY CONVULSION, NI CONMOCION, el cambio es AHORA.-Publicado:Federacion Galactica de la Luz
