Renace hoy Lemuria

Dicen que hace mucho tiempo un continente llamado Lemuria fue destruido y que solo unas cuantas personas lograron llegar a la ciudad intraterrena de Telos y salvarse.

La gran mayoría se hundió. Los sacerdotes y sacerdotisas permanecieron fieles a la Luz. Decidieron esperar el fin, cantando y orando, apoyando el proceso, irradiando su fuerza y coraje, mientras las aguas los cubrían y desaparecían.

Rodearon las auras de las personas con un manto de paz, permitiendo así la creación de un vehículo que los liberaba del miedo para que los cuerpos etéreos y la memoria celular no fuesen tan severamente marcados por la experiencia.
Dicen que la melodía que cantaban era la actualmente conocida como Auld Lang Syne, antiguo canto popular irlandés.
Lemuria desapareció en las aguas del océano Pacífico mientras las masas dormían bajo un cielo estrellado y ninguno de sus sacerdotes abandonó su puesto, ni mostró miedo.
Lemuria desapareció con dignidad.

Somos esos antiguos conocidos reuniéndose de nuevo

Antes del total hundimiento de Lemuria fue profetizado que un día, en un futuro lejano, muchos de nosotros nos reuniríamos en grupos y cantaríamos esta canción de nuevo, sabiendo con toda certeza, que la victoria de la Tierra estaba garantizada.

Una noche, después de leer estas palabras tan emotivas, me susurraron una letra para la melodía Auld Lang Syne, que fluyeron con la presteza de un rio. Así nació “Renace hoy Lemuria”, para que la cantemos todos, festejemos nuestro reencuentro y continuemos con la misión de asistencia a la humanidad hacia la senda de la ascensión.

El tiempo de la separación ha terminado.

Lua Català