MADRID, (EUROPA PRESS) -
Científicos que analizan los últimos datos de las naves Voyager y Cassini de la NASA han calculado que la Voyager 1, lanzada al espacio en 1977, podría cruzar la frontera del espacio interestelar en cualquier momento y mucho antes de lo previsto. Los resultados se detallan en la edición de esta semana de la revista Nature.
Datos del instrumento de partículas cargadas de baja energía de la Voyager, remitidos por primera vez en diciembre de 2010, han indicado que la velocidad hacia el exterior de las partículas cargadas del sol se ha reducido a cero. El estancamiento de este viento solar ha continuado al menos hasta febrero de 2011, marcando un espesor previamente imprevisto en la "zona de transición" en el borde de nuestro sistema solar.
"Hay un momento en que se va a cruzar la frontera, y esta es la primera señal de que está sobre nosotros", dijo Tom Krimigis, investigador principal del citado instrumento, con sede en el Laboratorio de Física Aplicada de la Universidad Johns Hopkins.
Krimigis y sus colegas combinaron los nuevos datos de Voyager con medidas inéditas de la cámara de ión y neutra incluida en el instrumento de imágenes de la magnetosfera de la Cassini. El instrumento de Cassini recoge datos sobre el flujo de los átomos neutros en nuestro sistema solar desde el exterior.
El análisis indica que el límite entre el espacio interestelar y la burbuja de partículas cargadas que el sol impulsa alrededor de sí mismo es probable que se sitúe a entre 16.000 y 23.000 millones de kilómetros, con una estimación afinada de aproximadamente 18.000 millones de kilómetros. Dado que la Voyager 1 ya se encuentra a 18.000 millones de kilómetros podría cruzar al espacio interestelar en cualquier momento.
"Estos cálculos muestran que nos estamos acercando, pero ¿cómo estamos de cerca? Eso es lo que no sabemos, pero la velocidad de Voyager 1 hacia el exterior ronda los 1.500 millones de kilómetros cada tres años, por lo que no habrá que esperar mucho tiempo", dijo Ed Stone, científico del proyecto Voyager en el Instituto de Tecnología de California en Pasadena.
Los científicos tienen la intención de seguir analizando los datos de la Voyager 1 en busca de confirmación. También se estudian los datos de la Voyager 2, pero no está tan cerca del borde del sistema solar como el Voyager 1. Voyager 2 está a unos 14.000 millones de kilómetros de distancia del sol.
Lanzados en 1977, los gemelos Voyager llevan de viaje 33 años. Son los centinelas de la Humanidad que han llegado más lejos en el espacio profundo en ruta para alcanzar el borde del espacio interestelar. Las Voyager fueron construidas por el Laboratorio de Propulsión a Chorro en Pasadena, California, que continúa operando ambas naves.